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Departamento de Justicia

Oficina de la Fiscalía Federal
Distrito Occidental de Texas

Para su divulgación inmediata

Viernes, Julio 6, 2018
John F. Bash
, Fiscal Federal
Contacto: PAO Daryl Fields

Extraditan a Estados Unidos a presunto miembro del cártel de Sinaloa de México por canalizar la entrada de cantidades masivas de marihuana y cocaína en los Estados Unidos

El presunto miembro del cártel de Sinaloa, Arturo Lozano-Méndez alias "Garza" está bajo custodia federal después de su extradición ayer en la tarde desde México a los Estados Unidos. Esta tarde, Lozano hizo su primera aparición en la corte federal en El Paso.

 

El anuncio fue hecho por el Fiscal Federal John F. Bash del distrito occidental de Texas; el Agente Especial de la Administración de Control de Drogas (DEA - por sus siglas en inglés) a cargo de la División de El Paso,  Kyle W. Williamson; Agente Especial del FBI a cargo de la División de El Paso, Emmerson Buie, Jr.; y el Agente Especial de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF - por sus siglas en inglés) a cargo de la División de Dallas, Jeffrey C. Boshek, II.

 

Lozano, de 47 años, es uno de 24 presuntos líderes del cártel de Sinaloa, incluyendo a Joaquín Guzmán Loera alias "El Chapo" e Ismael Zambada García alias "Mayo", acusado en abril de 2012 por cargos federales de crimen organizado en el distrito occidental de Texas. De acuerdo con la acusación, Lozano estuvo a cargo de los almacenes del cartel de Sinaloa en Juárez.

 

"La extradición de Arturo Lozano-Méndez muestra que la continua cooperación de México en el enfoque de importantes narcotraficantes es fundamental en nuestros esfuerzos mutuos para proteger al público del impacto negativo del tráfico de drogas", declaró el agente especial de la DEA Williamson. "La DEA continuará persiguiendo enérgicamente a los traficantes de drogas y a los funcionarios públicos corruptos que amenazan la seguridad de nuestras comunidades locales y la seguridad nacional de Estados Unidos y continuar en traer a los presuntos líderes de los cárteles ante la justicia - en ambos lados de la frontera."

 

"El FBI continuará persiguiendo agresivamente a organizaciones criminales multinacionales que han representado una amenaza para la seguridad nacional de los Estados Unidos, incluyendo a los servidores públicos corruptos que son miembros o que están en posiciones de liderazgo en el cártel de Sinaloa, quienes utilizan su posición para promover la actividad ilícita de esa organización ", dijo el agente especial del FBI BUIE. "El FBI está comprometido en mantener el estado de derecho e investigar a los involucrados en actividades delictivas que afectan a nuestras comunidades locales."

 

"Los cargos federales, arrestos y extradiciones asociadas con esta investigación demuestran nuestro compromiso y asociación en contra las organizaciones criminales multinacionales", afirmó el agente especial del ATF Jeffrey C. BoShek, II.

 

Lozano es acusado por un cargo de conspiración por llevar a cabo asuntos empresariales a través de un patrón de crimen organizado (conspiración RICO), un cargo de conspiración por posesión con la intención de distribuir cinco kilogramos o más de cocaína y 1,000 kilogramos o más de marihuana, un cargo por conspiración para importar a los Estados Unidos cinco kilogramos o más de cocaína y 1.000 kilogramos o más de marihuana, un cargo de conspiración por lavado de dinero y un cargo de conspiración por poseer armas de fuego en crímenes relacionados con el narcotráfico. 

 

Veinte (20) acusados, incluyendo a Lozano, permanecen bajo acusación en este caso. El juicio está programado para noviembre de 2018. Ante la convicción, Lozano se enfrenta hasta cadena perpetua en prisión federal.

 

Esta investigación resultó en la incautación de cientos de kilogramos de cocaína y miles de libras de marihuana en ciudades de todo Estados Unidos. Agentes de ley y orden también tomaron posesión de millones de dólares de ingresos por drogas que estaban destinados a ser devueltos al cártel en México. Los agentes y oficiales también incautaron cientos de armas y miles de municiones destinadas a ser contrabandeadas a México para ayudar a la batalla del cártel por el control de Juárez y los corredores locales de tráfico de droga.

 

Los cargos en la acusación son meramente alegatos, y todos los acusados son presuntos inocentes hasta que se demuestre su culpabilidad más allá de una duda razonable en un tribunal de justicia. 

 

El Departamento de Justicia de los Estados Unidos agradece al gobierno de México por su asistencia en este caso.

El DEA, FBI y ATF, junto con la oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional del Departamento de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos (ICE-HSI por sus siglas en inglés), la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos, la Oficina de Protección Aduanas y Fronteras (CBP por sus siglas en inglés), el servicio de Alguaciles de los Estados Unidos, el Departamento de Policía de El Paso y el Departamento de Seguridad Pública de Texas investigaron este caso. La Oficina de Asuntos Internacionales del Departamento de Justicia proporcionó asistencia significativa en la extradición. El caso está siendo procesado por los Fiscales Federales Auxiliares del distrito occidental de Texas.

 

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División Regional de Dallas