Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos

EUGENE, Oregon — Un hombre de Lincoln City, Oregon, con múltiples condenas por delitos graves fue sentenciado hoy a una prisión federal por su papel en una conspiración para distribuir grandes cantidades de metanfetamina en Lincoln City y sus alrededores y poseer ilegalmente un arma de fuego, anunció el Fiscal Federal Interino Scott Erik Asphaug. Felix Daniel Garcia-Mendoza, de 28 años, fue sentenciado a 204 meses en una prisión federal y cinco años de libertad supervisada.

"La Oficina de la Fiscalía Federal está comprometida a hacer todo lo posible para reducir el tráfico de drogas y los delitos violentos en todo Oregon. Un pilar clave de nuestra estrategia es reducir la posesión ilegal de armas y el uso por parte de los narcotraficantes", dijo el Fiscal Federal Interino Asphaug. "Aplaudo a nuestros socios encargados de hacer cumplir la ley por su persistencia en llevar al Sr. Garcia-Mendoza ante la justicia y hacer que nuestras comunidades costeras sean más seguras en el proceso".

"El descaro de las acciones de Garcia-Mendoza claramente justifica esta importante sentencia", dijo el Asistente Agente Especial a Cargo de la División Regional de Seattle de la ATF, Jonathan E. Blais. "Mostró un total desprecio por la ley y puso en peligro a la comunidad en su conjunto. La eliminación de Garcia-Mendoza y sus co-conspiradores de las calles ayudará a que Lincoln City y el condado de Lincoln sean más seguros".

Según documentos judiciales, a partir de marzo de 2018, agentes de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés) comenzaron a infiltrarse en el mercado de metanfetaminas de Lincoln City. Poco después, uno de los co-conspiradores de Garcia-Mendoza negoció la venta de un cuarto de libra de metanfetamina de Garcia-Mendoza a un agente encubierto. En su reunión inicial, los agentes compraron 113 gramos de metanfetamina a Garcia-Mendoza.

Garcia-Mendoza se reunió en repetidas ocasiones con agentes encubiertos y les vendió cantidades cada vez mayores de metanfetamina. En una ocasión, en junio de 2018, Garcia-Mendoza vendió a los agentes más de una libra y media de metanfetamina. Garcia-Mendoza también vendió a los agentes encubiertos una pistola que más tarde se determinó que había sido robada de una tienda de armas de Lincoln City. Llevaba una pistola Glock prominente en su cintura durante varias transacciones y la exhibió levantando su camisa y sacándola durante los tratos.

El 12 de diciembre de 2018, un gran jurado federal en Eugene devolvió una acusación de 11 cargos que acusaba a Garcia-Mendoza de conspiración para poseer con intención de distribuir metanfetamina, posesión con intención de distribuir metanfetamina, delito grave en posesión de un arma de fuego, posesión de un arma de fuego robada y posesión de un arma de fuego en cumplimiento de un delito de tráfico de drogas. Fue arrestado el 5 de enero de 2019 y se declaró culpable de todos los cargos menos tres el 20 de enero de 2020.

Otros tres coacusados—Billy Jack Reese, Jr., de 42 años, de Lincoln City, Oregon; James Levi Boyer, de 51 años, de Springfield, Oregon; y Patricia Rose Hedrick, de 25 años, de Newport, Oregon—fueron acusadas y se han declarado culpables de conspirar con Garcia-Mendoza para distribuir metanfetamina. Todos fueron sentenciados a tiempo cumplido en una prisión federal y están cumpliendo cinco años de libertad supervisada.

Este caso fue investigado por la ATF, el Departamento de Policía de Lincoln City y la Oficina del Sheriff del Condado de Tillamook. Fue procesado por Nathan J. Lichvarcik y William M. McLaren, Asistentes Fiscales Federales para el Distrito de Oregon.

Este caso fue traído como parte del Proyecto de Vecindarios Seguros (PSN, por sus siglas en inglés). El PSN es la pieza central de los esfuerzos violentos de reducción de crímenes del Departamento de Justicia. El PSN es un programa basado en evidencias probado para ser eficaz en la reducción de los delitos violentos. A través del PSN, un amplio espectro de partes interesadas trabajan juntos para identificar los problemas de delincuencia violenta más apremiantes en la comunidad y desarrollar soluciones integrales para abordarlos. Como parte de esta estrategia, el PSN enfoca los esfuerzos de aplicación en los delincuentes y socios más violentos con programas de prevención y reingreso basados localmente para reducciones duraderas en el crimen.