Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos

ALBUQUERQUE – Ethan Guillen, de 20 años, de Albuquerque, Nuevo México, se declaró culpable en un tribunal federal ayer de cargos derivados de un incidente en 2017 en el que entró en la casa de su ex novia sin permiso y plantó una bomba debajo de su cama.

 

Un gran jurado acusó a Guillén por posesión de un dispositivo destructivo no registrado e intento malicioso de destruir propiedades por medio de fuego o explosivos. Según los documentos de la corte, Guillen entró en el apartamento de su ex novia el 18 de mayo de 2017. La víctima y su familia asistían a una graduación fuera de casa. Guillén colocó en secreto un artefacto explosivo improvisado debajo de la cama de la víctima que consiste en una olla a presión con polvora negra, napalm y metralla como tuercas y tornillos en el interior. Guillen conectó el dispositivo a un temporizador y toma de corriente. Puso el dispositivo para que explotara temprano a la mañana siguiente. Sin embargo, el dispositivo no explotó según lo programado. Varios días después, la víctima encontró el dispositivo debajo de su cama. La madre de la víctima desmontó parcialmente el dispositivo y alertó a la policía.

 

Guillen está actualmente en custodia en espera de una sentencia en una fecha futura. El delito de posesión del dispositivo destructivo no registrado conlleva una sentencia de hasta 10 años de prisión, mientras que el intento de Guillén de destruir la propiedad conlleva una sentencia de 5 a 20 años de prisión.

 

La Agencia de Control de Bebidas Alcohólicas, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos investigó este caso con la ayuda del Departamento de Policía de Albuquerque. Los Asistentes Fiscales Federales Howard R. Thomas y David M. Walsh están procesando el caso.